Escoge una postura en la que te sientas a gusto (puede ser sentada en la oficina, en el sofá en casa, y hasta acostada en tu cama).
Inhala, contando hasta cuatro, y exhala, contando hasta cuatro.
Siempre por la nariz.
La respiración cuadrada aumenta la concentración, relaja el sistema nervioso y reduce el estrés.
Además es particularmente útil a la hora de dormir. Conforme vayas avanzando, intenta inhala y exhalar contando hasta seis, ocho o 10.
